El mundo rural también es feminista y no piensa quedarse atrás en la lucha por la igualdad entre hombres y mujeres. Este cortometraje quiere dar voz a la mujer rural que lucha cada día porque se reconozcan sus derechos en un mundo que ha sido dominado por el patriarcado en toda la historia de la humanidad.
Sinopsis: Carmen, una octogenaria, visita cada día a su marido en el cementerio, pero hoy tiene algo muy importante que contarle: se ha hecho feminista.
Actualmente ha sido seleccionado en treinta y siete festivales nacionales e internacionales.